jueves, 17 de marzo de 2016

"La sangre de los libros"

Enigmas y libros de la literatura universal.

Autor: Santiago Postegillo

Ensayo
Editorial Planeta, S.A.
1ª edición: octubre de 2014

222 páginas.








BIOGRAFÍA

Nacido en Valencia en 1967, Santiago Posteguillo Gómez es un destacado escritor de novela histórica.


Este filólogo, lingüista y Doctorado Europeo por la Universitat de València estudió literatura creativa en la Universidad de Denison (USA) y Lingüística y Traducción en Gran Bretaña, y en la actualidad continúa dando clases como profesor titular en la Universitat Jaume I de Castelló, donde imparte cursos de literatura inglesa.

A la edad de 6 años realizó un viaje por Italia, quedando tan impactado por lo que allí vió e imaginó que en ese mismo momento nació su pasión por la Antigua Roma. 




Entre sus obras destacan la Trilogía sobre Escipión el Africano, formada por Africanus: el hijo del cónsul (2006), Las legiones malditas (2008)y La traición de Roma (2009), y la Trilogía sobre Trajano: Los asesinos del emperador (2011), Circo Máximo (2013) y La legión perdida (2016).

También es autor de los ensayos La noche en que Frankenstein leyó El Quijote (2012) y La sangre de los libros (2014).





SINOPSIS



Asesinatos, suicidios, duelos, condenas a muerte, guerras, eclipses, vampiros, juicios y misterios. Detrás de los grandes libros se esconde mucha más sangre de la que podríamos imaginar.

Santiago Posteguillo, prestigioso referente de la narrativa histórica, nos guía en un magnífico viaje desde los discurso de Cicerón hasta las obras de Asimov, por la historia más enigmática y sorprendente de la literatura universal. Donde la vida y las obras, efectivamente, se escriben con sangre, sudor y mucho talento.




COMENTARIO

Siempre es un placer leer a Santiago Posteguillo. En esta ocasión de la mano del autor haremos un amplio recorrido por la historia de la literatura universal y conoceremos un buen puñado de anécdotas de la vida de muchos de los grandes autores literarios. Un repaso por algunas de sus obras más destacadas, pero también por sus historias personales y los entresijos de la publicación de sus obras.

En poco más de 200 páginas conoceremos a Cicerón y a Petrarca, a Virgilio y a Séneca; descubriremos los versos perdidos de Dante y su Divina Comedia, viviremos los problemas financieros de Gutemberg, conoceremos a Félix Lope de Vega y su turbulenta vida, a Pedro Calderón de la Barca y a Francisco de Quevedo...

...Ramses II, Percy B. Shelley y el propio autor quedarán unidos por una película de Woody Allen en los cines Babel de Valencia; grupos de heavy metal como Iron Maiden o Tierra Santa poniendo música a la balada del viejo marinero de Samuel Coleridge o a La canción del pirata de Espronceda...

...Víctor Hugo con su gran obra Nuestra Señora de París evitando la demolición de la catedral de Notre Dame; la misteriosa muerte de Edgar Allan Poe quien, paradojas del destino, no contó con ningún Auguste Dupin que esclareciera lo ocurrido...

...la agorafobia de Emily Dickinson y el "mal uso" que hacía de los signos de puntuación; la muerte de Gustavo Adolfo Bécquer el 22 de diciembre de 1870 (apenas 40 minutos antes de que se produjera un eclipse de sol); el hara kiri con el que puso fin a sus días Emilio Salgari...

...Vicente Blasco Ibáñez como "arma secreta" para que Francia consiguiera el apoyo de Estados Unidos en su guerra contra Prusia ("Los cuatro jinetes del Apocalipsis"); la extraña desaparición de Agatha Christie durante 11 días y de la que nunca se supo la verdad...

...los relatos escritos por una madre (Ángeles Mastretta) para despertar a su hija pequeña del coma, 37 historias recopiladas en "Mujeres de ojos grandes"; autores que se resisten a que las editoriales les cambien el final de sus historias o la imagen de la cubierta (como Guillermo Fesser y sus "Ruedas y el secreto del GPS"); Isaac Asimov y la verdadera causa de su muerte...



Anécdotas de la vida de algunos personajes indispensables de la historia de la humanidad, autores de algunas de las obras esenciales que han contribuido a hacernos tal y como somos.

Anécdotas -algunas reales, otras que tal vez sucedieron y unas pocas que, sin estar del todo probadas, bien pudieron haber sucedido así- pero todas ellas narradas con la maestría y el buen hacer de uno de los grandes de la literatura histórica actual.


En definitiva: un libro fascinante. Fácil de leer, interesantísimo y muy ameno, escrito como solo unos cuantos podrían hacer, y que constituye un verdadero catálogo de magníficos autores y de algunas de sus obras más destacadas. No os lo perdáis.


Termino este comentario con palabras del propio Posteguillo. Con una frase que es a su vez un ruego y un buen consejo, y con la que finaliza el libro:

"Y, por lo que más quieran, no se detengan, no dejen de leer ahora simplemente porque se nos hayan terminado las páginas". Página 208.






* Próximas lecturas: Ofrenda a la tormenta, de Dolores Redondo.
                               Voces de Chernóbil, de Svetlana Alexievich.
                             


lunes, 7 de marzo de 2016

"Legado en los huesos"

Autora: Dolores Redondo


Novela negra.   
Ediciones Destino, S.A.
1ª edición: noviembre de 2013
4ª reimpresión: diciembre de 2013
553 páginas.








BIOGRAFÍA

Nacida en San Sebastián en 1969, Dolores Redondo estudió Derecho y Restauración, y comenzó en la literatura escribiendo relatos cortos y cuentos infantiles. En 2009 publicó su primera novela Los privilegios del ángel. 

A principios de 2013 apareció El guardián invisible, primero de los libros que componen la Trilogía del Baztán. A finales de ese mismo año publicó Legado en los huesos y ya en 2014 Ofrenda a la tormenta, con el que concluía la serie. Desde su inicio la trilogía se ha convertido en todo un fenómeno de ventas, habiendo sido traducida a más de 15 idiomas y vendidos sus derechos para llevarla a la gran pantalla.




SINOPSIS


El juicio contra el padrastro de la joven Johana Márquez está a punto de comenzar. A él asiste una embarazada Amaia Salazar, la inspectora de la Policía Foral que un año atrás había resuelto los crímenes del llamado bajasaun, que sembraron de terror el valle del Baztán. 

Amaia también había reunido las pruebas inculpatorias contra Jasón Medina, que imitando el modus operandi del basajaun había asesinado, violado y mutilado a Johana, la adolescente hija de su mujer.

De pronto, el juez anuncia que el juicio debe cancelarse porque el acusado acaba de suicidarse en los baños del juzgado. Ante la expectación y el enfado que la noticia provoca entre los asistentes, Amaia es reclamada por la policía. El acusado ha dejado una nota suicida dirigida a la inspectora, una nota que contiene un escueto e inquietante mensaje: "TARTTALO". Esa sola palabra que remite al personaje fabuloso del imaginario popular vasco destapará una trama terrorífica que envuelve a la inspectora hasta un trepidante final.




COMENTARIO

Segundo capítulo de la Trilogía del Batzán. Continúa la historia de la inspectora Salazar apenas unos meses después de donde concluyó la primera entrega.

Amaia continúa siendo la gran protagonista de la historia y, en la misma línea del libro anterior, se va combinando la investigación policial con algunos fenómenos extraños, los problemas personales de Amaia y su cada vez más oscura historia familiar junto con algunas pinceladas de la mitología navarra, presente en los tres libros.

"Joder, no estaba loca. ¿Por qué tenía que pasar aquello? Tenía problemas de sobra en su vida privada, además era policía de homicidios ¿quién cojones en el reparto de mierdas raras por persona había decidido que le tocaran tantas a ella?. Amaia, página 439.

Más que de la segunda parte de la historia en realidad se debería hablar de su continuación. O incluso de que nos encontramos ante un único libro (separado en dos tal vez únicamente por cuestiones comerciales y de tamaño), ya que aquí se repiten muchas de las características señaladas en El guardián invisible.


Encontramos de nuevo algunos pasajes demasiado extensos, que parecen intencionalmente alargados, que no aportan nada a la historia y que solo consiguen aumentar artificialmente la extensión del libro y distraer al lector de lo importante de la trama. Como ejemplo de ello destaca cómo nos cuenta la autora los últimos días del embarazo de Amaia y el interminable parto de Ibai (aunque absolutamente normales ambos) ya en el capítulo 1; o las repetitivas descripciones de edificios y lugares que llegan a resultar exasperantes con tanto detalle innecesario (como el caso de un restaurante donde come la protagonista en el capítulo 8).


En esta misma línea, muchos capítulos comienzan con la inevitable referencia a la lluvia siempre presente: la lluvia con la que amanece el día; la que para y vuelve a caer; las nubes que aparecen o no en el cielo. Al final me ha resultado monótona tanta reiteración. Ya sabemos que por aquellas tierras -y en esa época del año- llueve con bastante frecuencia, pero no necesitamos que nos lo repitan constantemente.



También, como en el primer libro, aparecen de tanto en tanto pasajes que chocan con el tono ágil y el estilo sencillo del resto del texto.

"Tardaron apenas quince minutos en llevar a cabo todo el proceso. Las fotografías previas, rociar la pared con aquel milagro llamado Luminol que había revolucionado la ciencia forense al permitir detectar trazas de sangre que reaccionaban catalizando la oxidación y volviéndose visibles a una luz con una longitud de onda diferente a la normal, algo tan simple como la bioluminiscencia que se observaba en las luciérnagas y algunos organismos marinos".  Página 196.

, o una terminología innecesariamente técnica para explicar minuciosamente unas pruebas de ADN (páginas 313 y 318). La autora demuestra haberse documentado ampliamente sobre las diferentes técnicas científico-policiales, pero no es necesario que nos lo demuestre cada vez que tiene ocasión. ¿Es la mejor opción reproducir la información de forma tan literal? ¿No sería mejor dejar constancia de las pruebas realizadas sin necesidad de apabullar al sufrido lector?



En cuanto a los personajes, continúan siendo multitud, con contínuas entradas y salidas de la historia sin (aparentemente) demasiado sentido. En esta lína resulta destacable el caso del enigmático Dupree, el agente del FBI al que recurre Amaia en determinadas ocasiones para pedirle ayuda y consejo, y con quien habla a través de un teléfono apagado (capítulo 30); o el extraño juez Markina, que queda retratado en varias ocasiones como un simple quinceañero, que únicamente se dedica a tirarle los tejos a Amaia en cuanto tiene la más mínima ocasión. Un personaje que resulta demasiado increíble y por momentos hasta ridículo en su actitud. Excesivamente forzado, metido como con calzador en la historia tal vez por necesidades posteriores de la trama.


Cartas del tarot


Capítulo aparte merece lo absurdo e irreal de la trama en algunas ocasiones, ya que si ya resulta extraño que un policía investigue un caso en el que pueda estar implicado personalmente (como ocurría en el primer libro), lo que es de todo punto imposible, increíble y hasta absurdo (además de totalmente contrario al procedimiento y a la legalidad) es que no sea inmediatamente apartada del caso y que continúe con la investigación cuando en ella están implicados, en mayor o menor medida, varios de sus familiares directos -tanto en el bando de las víctimas como en el de los sospechosos-.

"No hay miedo como el que ya se ha probado, del que se conoce el sabor, el olor y el tacto. No hay miedo como el que conocimos un día y que permanecía inmóvil, respirando con un jadeo húmedo en algún lugar de nuestra mente. No hay miedo como el que produce la sola posibilidad de que el miedo regrese. Porque sabes que si regresa, no lo resistirías; si volviese, acabaría contigo y con tu cordura". Página 512.


En resumen: más de lo mismo. Legado en los huesos me ha parecido una historia interesante pero que por momentos parece escapársele a la autora como el agua entre los dedos. Y es una verdadera lástima porque creo que podría haber dado mucho más de sí.

Por el momento mi opinión personal no es demasiado positiva. Ya llevamos casi mil páginas leídas de la trilogía y tan solo nos queda otro libro más. Espero que el último me haga cambiar de opinión.




* Próxima lectura: El lejano país de los estanques, de Lorenzo Silva.